Foro Público
Riesgos e impactos de la minería en Cajamarca
Cajamarca, 28 de noviembre de 2017
Con el fin de debatir sobre los impactos ambientales que ya se dejan sentir en la región por las actividades extractivistas, los conflictos sociales generados por esta actividad y la importancia de la mujer en la lucha por el respeto a los derechos sobre la naturaleza y su territorio; la Red Peruana por una Globalización con Equidad – RedGE, con el apoyo de la Red Muqui, Grufides, la Red Interquorum Cajamarca y la Fundación Friedrich Ebert, realizaron el Foro Público “Riesgos e impactos de la minería en Cajamarca y alternativas de desarrollo sostenible”, el día 28 de noviembre en Cajamarca.
En el foro participaron como panelistas Martín Scurra de RedGE; Sergio Sánchez, especialista en Gestión Territorial; Dickson Laban Chinchay, Gerente de Recursos Naturales y Medio Ambiente del Gobierno Regional de Cajamarca y Ana María Llamoctanta, Presidenta de las Rondas de Mujeres del Tambo, Bambamarca.
Las concesiones mineras en Cajamarca
Para Sergio Sánchez existen 1,083 pasivos ambientales inventariados en todo Cajamarca, y en el transcurso de los años seremos la región en todo el Perú, con más pasivos mineros de la historia. Hay zonas en Hualgayoc que están totalmente contaminadas por la minería formal e informal y, según la OEFA, el desastre es total. “Qué hacemos, no podemos permitir que este problema aumente, no podemos permitir que los conflictos sociales por la actividad minera se incrementen los próximos años, las autoridades tienen que hacer su trabajo”, manifestó.
Sánchez indicó que hablar de Cajamarca es hablar de un elevado número de concesiones mineras, pero también es hablar del incremento de los conflictos sociales, de las personas que están contaminadas con plomo en la sangre y del número de muertes que ello ocasiona.
En Hualgayoc hay pasivos ambientales que deben ser fiscalizados por las autoridades. “Tiene que haber un proceso de remediación que, si bien es complejo, debe estar articulado con toda la población. Hay gente enferma, en el año 2002 se hizo una evaluación a 311 personas de la zona, y todos tenían plomo en la sangre. Este proceso de remediación es importante para solucionar un problema fuerte, y allí también se debe mirar desde el gobierno nacional”, enfatizó.
Se necesita un Ministerio de Energía más serio porque el problema en Cajamarca es la falta de agua, la mayoría de fuentes de agua se han secado por la actividad minera, y todos los cajamarquinos nos preguntamos ¿quién le dará agua a Cajamarca en 15 o 20 años?.
Los conflictos sociales
A su turno Dickson Laban, indicó que el responsable de los conflictos sociales en Cajamarca es el Ministerio del Ambiente, ya que se hace a un lado y no tiene un verdadero compromiso con el pueblo, que vive afectado por la actividad minera. “Hay personas contaminadas con plomo, se entregan las muestran de sangre pero ni el MINAM ni el MINSA hacen caso, por el contrario están en cosas muy superficiales”, afirmó.
Añadió que los ingresos recaudados según la principal actividad económica, muestran que desde el año 2000 hasta el 2016, el sector agropecuario presenta una curva ligeramente en crecimiento, le sigue el sector construcción, con un cierto despegue y el sector comercio con mayor aceleración. Pero cuando se habla del sector minero, se ve que su historial es muy volátil, ya que creció del 2004 al 2007 pero cae en el 2009. “Si la economía de Cajamarca dependiera de la minería todos hubiéramos caído. Aquí demostramos que la estabilidad económica la viene dando la manufactura, que va generando mayores ingresos en estos años”, resaltó.
Si hablamos del Impuesto a las Ventas, vemos que el sector minero etuvo un ingreso de 12 mil millones de soles, pero devolvió al Estado peruano 13 mil 500 millones de soles, es decir perdió, ¿quién hace un negocio para perder?, si vemos esta cifra, eso quiere decir, que más bien el Estado le debe dinero.
Desde la región Cajamarca proponemos, diversificación económica y productiva, basado en ciertos parámetros de análisis que nos permitan avanzar en un crecimiento sostenible. En materia de productos de reforestación, tenemos una propuesta de conservación del complejo de lagunas y el proyecto del laboratorio regional del agua, en la que acompañarán los campesinos de la zona. “lamentablemente el ANA nos deja sin piso, y no nos presta interés, sin embargo, el pueblo será quien haga validar este tipo de trabajos que brinda el gobierno regional”, dijo.
La agricultura genera sostenibilidad, por ello, se está en búsqueda de producción regional. Cajamarca es una región que vive de la agricultura, para ello es necesario fortalecer la asociatividad con un enfoque territorial y enfoque de mercado, es decir, asociaciones que hagan conocer productos, como el café, que es producción orgánica, cuyo quintal de exportación cuesta 10 mil dólares y es considerado el mejor del mundo. “Queremos elevar la producción en un 20 por ciento, queremos instalar el parque industrial y darle valor agregado a los productos de Cajamarca como el café, la leche, la papa”, sostuvo.
La posición de la mujer cajamarquina
Finalmente Ana María Llamoctanta narró que los campesinos vivimos de la agricultura y la ganadería, como cajamarquinas estamos pendientes de los problemas de la minería. “La mina nos trae destrucción, contaminación y enfermedades, los cajamarquinos estamos decepcionados de la minería porque nos han enfermado con plomo, y el gobierno ha querido reprimirnos a punta de balas, nosotras no nos dejamos y defenderemos nuestras tierras unidas para que la minería siga avanzando”.
Esta actividad afecta nuestro patrimonio, nuestra economía y nuestra tierra. En las luchas la mujer siempre ha estado delante de los varones para defender nuestro derecho que es el agua.
Exposiciones:
Ver la presentación de Martin Scurrah.